ïSTA ES MI VIDA

ïSTA ES MI VIDA

Robson de Souza, mïs conocido como Robinho, es una de las mayores revelaciones del fïtbol brasileïo de los ïltimos tiempos. Natural de Sïo Vicente, una ciudad costera ubicada en la regiïn de Sïo Paulo, el chaval fue descubierto a edad temprana. Y temprano fue tambiïn su debut en el fïtbol profesional. Con apenas 18 aïos ya se habïa convertido en la estrella del Santos, equipo con el que conquistï el Campeonato Brasileiro.

Robinho comenzï su vida deportiva jugando a fïtbol sala en el club Beira-Mar. La entidad, ya desaparecida, dio lugar a un complejo deportivo que hoy lleva su nombre. Pero fue ahï donde dio los primeros pasos futbolïsticos, deleitando a los aficionados y desesperando a los rivales con sus desconcertantes regates.

Con nueve aïos, marcï 73 goles en una sola temporada de fïtbol sala. El tïcnico Roberto Antïnio dos Santos, Betinho, se fijï en ïl en 1994 y lo hizo debutar sobre el cïsped con el club Associaïïo Atlïtica dos Portuïrios. Pero el chaval permaneciï ahï poco tiempo, ya que enseguida se incorporï a la cantera del Santos. Ya en aquella ïpoca, el ariete se ganï los elogios del propio Pelï, que por aquel entonces estaba al frente de las categorïas juveniles del Santos.

Y como siempre, a su lado estaba su fiel compaïero Diego. Al principio, Robinho solo era la sombra de su colega. La primera vez que los ojeadores del Santos fueron a ver jugar a los dos jïvenes, fue Diego el que llamï su atenciïn. Pero Robinho fue ganando notoriedad y tras lograr el tïtulo del Campeonato Paulista Sub-17 en 2001, ambos fueron ascendidos al primer equipo. Los aficionados del Santos no podïan creer su suerte al ver cïmo de su amado club surgïan simultïneamente dos figuras de semejante calibre.

Finalmente, en 2002 la fama de Robinho traspasï la ïrbita de su equipo y se convirtiï en un ïdolo a nivel nacional. En menos de un aïo, pasï de ser una joven promesa a convertirse en una de las grandes estrellas del fïtbol brasileïo.

ïse mismo aïo, contribuyï al triunfo del Santos en el Campeonato Brasileiro, y acabï asï con la mala racha de la entidad, que no habïa logrado conquistar el ansiado tïtulo en 18 aïos. En la final contra el Corinthians, el eterno rival, Robinho se coronï. Ademïs de marcar un gol, deleitï a la aficiïn con sus caracterïsticas bicicletas.

En 2003, se proclamï con el Santos subcampeïn de la Copa Libertadores y al aïo siguiente volviï a comandar el ataque de su equipo, que conquistï nuevamente el campeonato nacional. El jugador devolviï asï la alegrïa al fïtbol brasileïo y encandilï a los aficionados de todo el païs.
Pero, despuïs de conquistar Brasil, era hora de buscar nuevos desafïos.

El primero que le abriï las puertas de Europa fue su antiguo entrenador en el Santos, Vanderlei Luxemburgo, quien lo fichï para el Real Madrid, uno de los clubes mïs conocidos del mundo. Allï recibiï la camiseta con el dorsal nïmero diez.

No obstante, Robinho todavïa es prïcticamente un novato en la selecciïn nacional. Tras la decepcionante actuaciïn de Brasil en el Mundial de Alemania 2006, en la que el jugador no tuvo ocasiïn de demostrar su talento, el ariete se ha convertido en uno de los delanteros titulares de la selecciïn, y seguro que desempeïa un papel fundamental en la Copa Mundial de la FIFA Sudïfrica 2010.